miércoles, 20 de noviembre de 2013

De Susana Gonzalez

Aun que agradezco la confianza aun que disfruto el chisme y el chiste.

 Reconozco en mis iguales la hora de constelar a favor de la compañ+ia. . .

 "Existen océanos de lágrimas que las mujeres jamás han llorado, pues les han enseñado a llevarse a la tumba los secretos de su madre y su padre, de los hombres y la sociedad y los suyos propios. El llanto de una mujer siempre se ha considerado muy peligroso porque abre las cerraduras y los pestillos de los secretos que lleva dentro. Pero en realidad, por el bien del alma salvaje de la mujer, es mejor llorar." 

Clarissa Pinkola Estés Lo no- dicho: Los hechos silenciados se convierten en algo no puesto en palabras que pasan a la siguiente generación como secretos familiares. Por lo tanto, estos pueden actuar sobre varias generaciones. Los tres grandes temas que suelen esconderse en el interior de las familias tienen que ver con el origen, la muerte y el sexo. 

Generalmente, los secretos fueron hechos vergonzantes en la época en que sucedieron, por eso se los excluye. Entonces, todo lo que atenta contra una buena imagen personal, familiar y social y que la mayoría de la gente no logra manejar, se convierte en secreto. Esto no significa que todos los integrantes de la familia deben saber todo lo que ocurre indiscriminadamente, de hecho es fundamental reconocer cuál es el límite entre lo privado y lo oculto. Muchas veces se produce una cadena. Guardamos un secreto y tapamos los efectos que produce. En algún momento esta situación estalla y produce daños.

 “La verdad aunque sea desagradable y no sea lo que estamos esperando, no produce daños, lo que genera el daño es la acción de ocultar”. 

POR EL BIEN DEL ALMA SALVAJE DE LA MUJER: ES MEJOR LLORAR...Y HABLAR...DESTAPAR SECRETOS Y VIVIR NUESTRA PROPIA REALIDAD.. CON AMOR, ACEPTACION Y COMPRENSION...¡VIVAMOS FELICES Y LIBRES


Fuente : Susana Gonzalez

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